Sobre el café:

En Hacienda Sonora, las cerezas recolectadas a mano primero se sumergen en agua para la separación flotante, antes de que los granos se sequen dentro de la fruta (en lugar de después de que se haya quitado la fruta, como es el caso de los cafés procesados ​​en húmedo o “lavados”). Las cerezas se secan en una lona negra sobre hierba durante 12 días utilizando diferentes capas dependiendo de la etapa de secado (siempre tapadas por la noche). Estos controles mantienen bajas las temperaturas, lo que preserva la calidad de la taza y la vida útil del café. Después de 12 días, el café se traslada a la bodega para descansar por 3 días (al 14% de humedad) antes de obtener un secado final en un secador mecánico (lo que permite una mejor uniformidad) a temperaturas que nunca superan los 35C. Una vez que el café alcanza una humedad del 10,5%, reposa durante 2 meses antes de sacarlo de la cáscara seca y luego pasar por la clasificación por peso, criba, densidad y color.